AECOC, la Asociación de Empresas de Gran Consumo, reunió en Lleida a más de 300 profesionales del sector cárnico de todo el país en el marco del Congreso AECOC de Productos Cárnicos y Elaborados, celebrado los días 24 y 25 de febrero. Durante dos días, destacados analistas y expertos del sector analizaron, de la mano de AECOC, los retos a los que debe hacer frente la cadena agroalimentaria para ganar eficiencia y competitividad.

Tras la inauguración del Congreso por parte de Domènec Vila, director general d’Alimentació, Qualitat i Indústries Agroalimentàries de la Generalitat de Catalunya y de José María Bonmatí, director general de AECOC, los profesionales asistentes analizaron la evolución y principales tendencias del mercado de productos cárnicos.

Según Roberto Butragueño, client business y experto en distribución de Nielsen, estos artículos siguen constituyendo la primera partida del gasto de la cesta de la compra de los españoles, con una cuota en valor del 17.5%. A pesar de una mejora del índice de confianza del consumidor, en 2014 descendió el gasto de los españoles en necesidades básicas, con un descenso generalizado de los precios en el sector de alimentación y una subida en volumen de la marca del distribuidor.

 

El experto de Nielsen destacó igualmente una mejor progresión de la categoría de carnes en las ventas en hipermercados y supermercados, con un crecimiento de la categoría de carne fresca del 1.1% y de la charcutería del 0.9%. En este sentido, destaca la mejora de la categoría de charcutería tanto en precio como en volumen de ventas.

 

Por variedades, la carne de pollo sigue siendo la preferida de los consumidores con una cuota del 37% de las ventas, seguido del cerdo (29%) y el vacuno (14%). Sin embargo, la carne de cerdo es la que gana mayor cuota de mercado de 2013 a 2014, debido también a una bajada de su precio (un 2.5% menos que en 2013). En charcutería, el jamón york (19%) y el jamón serrano (17%), son las dos variedades que mayor cuota de mercado en ventas.

Roberto Butragueño destacó, por último, las tendencias emergentes que marcarán la evolución del mercado cárnico español: por un lado la transformación digital y por el otro el valor del producto saludable, de proximidad y de calidad.

En un mercado cada vez más globalizado no debemos perder de vista la importancia de todos los eslabones que conforman la cadena de valor agroalimentaria. Es fundamental que todos los actores implicados sean conscientes de que juegan un papel destacado en la cadena y orienten sus estrategias hacia el consumidor final.